La nueva normativa, que fue aprobada la noche del martes en Brasilia, la capital del país, reconoce al bitcoin como una representación digital de valor que puede utilizarse en el país como medio de pago y como activo de inversión.
El proyecto de ley, que cubre una amplia gama de lo que se refiere como “activos virtuales”, ahora es todo lo que se necesita para que se convierta en ley: la firma del presidente.
Se anticipa que el Banco Central de Brasil (BCB) estará a cargo cuando se use bitcoin como forma de pago, y la Comisión de Bolsa y Valores (CVM) de la nación estará a cargo cuando se use como una forma de activo de inversión. La autoridad fiscal federal (RFB), el BCB y la CVM contribuyeron al desarrollo de la legislación de revisión.
Brasil, que tiene un próspero mercado de criptomonedas, ocasionalmente ha visto a más personas intercambiar criptomonedas como bitcoin que invertir en acciones. La nación ahora tiene como objetivo crear las condiciones para que eso se traduzca en un mayor uso regular en las transacciones financieras.
El rechazo de una disposición que buscaba reducir algunos impuestos estatales y federales sobre las compras de equipos de minería de bitcoin fue un gran descuido en la votación del martes.
La regulación de los proveedores de servicios, como las bolsas, que deben adherirse a reglas específicas para operar en Brasil, es una de las disposiciones adicionales. Al definir tales organizaciones como aquellas que brindan comercio, transferencia, custodia, administración o venta de criptomonedas en nombre de un tercero, el proyecto de ley busca regular el establecimiento y la operación de los proveedores de servicios de Bitcoin en Brasil. Los proveedores de servicios de criptomonedas solo podrán operar en la nación con el consentimiento explícito del gobierno federal.
Una regla buscaba obligar a tales empresas a distinguir claramente entre sus propios activos y los de sus clientes, como cuando manejan bitcoin en su nombre. La disposición tenía como objetivo detener situaciones como la que presenciamos recientemente con FTX, en la que los fondos de los usuarios se mezclaron con los fondos de la empresa, y para ayudar en la recuperación de los activos de los usuarios en caso de quiebra.